Calicivirus Felino
Esta es una enfermedad más benigna que la Rinotraqueitis viral felina, aunque en ocasiones, puede originar cuadros más graves.
Existen algunas características que sirven para diferenciarla de la Rinotraqueitis viral felina.
Las úlceras en la boca son una característica frecuente en la calicivirosis y, en algunos casos, puede ser el único síntoma de la enfermedad. Estas úlceras aparecen sobre el paladar, lengua y orificios nasales.
El malestar general es menos intenso que en la Rinotraqueitis, lo mismo que los estornudos, las secreciones nasales y conjuntivales. La salivación no es característica de esta enfermedad.
Algunas variedades de este virus pueden generar neumonía.
Rabia
Es una enfermedad que afecta al sistema nervioso central de todos los animales de sangre caliente. Está provocada por un Rabdovirus que se excreta con la saliva de los animales contaminados y se transmite por mordedura o heridas.
La rabia, en su curso, se divide en tres fases: el periodo prodrómico, la fase de excitación y la fase paralítica.
El periodo prodrómico suele durar poco tiempo en los gatos (1 día) y se manifiesta con un cambio repentino de comportamiento. Aparecen inquietos o deprimidos, escondiéndose en lugares oscuros.
En la fase de excitación, el gato aparece cada vez más nervioso e irritable con mucho peligro para otros animales y personas pues muerde todo lo que encuentra a su paso, inclusive objetos inanimados como sillas, palos etc. Esta fase puede durar hasta 7 días, aunque a veces puede no existir.
La fase paralítica, como su nombre lo indica, se traduce gradualmente en una parálisis generalizada, coma y muerte.
Lamentablemente no existe un tratamiento curativo para esta enfermedad.
La vacunación es obligatoria en casi todos las países, excepto en aquellos en los que está erradicada.
En los gatos se recomienda vacunar a partir de los 3 meses, con revacunación anual durante toda la vida.
La mejor forma de prevenir la enfermedad es mediante la vacunación a partir de los 2 meses de edad.